LAS APARIENCIAS ENGAÑAN... Y MATAN!!!

Hace algun tiempo tuve la oportunidad de ver un reportaje en las noticias, de cómo existían cierto tipo de personas que van a los supermercados a comprar "supuestamente" y que luego de llenar uno o dos carros con productos de mucho valor, se pasean por los pasillos del super. Sin embargo cuando llega el momento de retirarse no salen con las compras, dejan el o los carros en alguna parte y se van. Tambien en un diario de tiraje nacional se hizo un reportaje de cómo se está dando una tendencia en relacion a los libros; algunas personas adquieren libros grandes para impresionar, en el bus, metro, en la playa o plazas, pero con la gran diferencia de que no lo leen.
¿Qué hay en ambos casos? Un gran sentido de aparentar lo que uno no es, para recibir el reconocimiento de los demás.

Lucas autor del libro de Hechos nos muestra un caso de apariencia en la iglesia primitiva el cual fue corregido inmediatamente por la mano de Dios.

a continuación sermón predicado en la Gloriosa Iglesia Maranata, el dia domingo 20 de Abril del 2008...basado en libro de Hechos 5.1-6

LAS APARIENCIAS, NOS LLEVAN A:

I. URDIR PLANES (v. 1-2):

a) en nuestros corazones, todo lo que a Ananias le ocurrio fue consecuencia de sus propios planes, urdidos en su corazón. Cuando nuestro corazón está lejos de la voluntad de Dios, o sea lejos espiritualmente, ideamos cosas tan atrevidas como querer engañar a Dios, nuestro pecado nos alienta a jugar con Dios, despreciando la omnipresencia de Dios.

b) involucrando a otros, no nos basta planear las cosas, sino que también necesitamos involucrar a otros en nuestras malas intenciones. Esto manifiesta dos cosas, primero que nos somos lo suficientes hombre y valientes como para poder hacer las cosas solos, y asumir las consecuencias de ello luego; y en segundo lugar que quienes aceptan nuestros planes en contra de Dios, están tan lejos de Dios como quien le invita, por lo tanto no es inocente ante Él.

c) ¿para que hacemos todo esto? para ser reconocidos, tenemos una necesidad imperiosa de demostrar a los demás que somos algo o alguien. Y para ello "el fin justifica los medios". Ananías y Safira su esposa, querian ser reconocidos como piadosos y que eran desprendidos de lo material, al igual como lo fue Bernabé. Sin embargo no estaban dispuestos a perder todo el dinero. ¿Dónde en realidad estaba su corazón? muy lejos de Dios...

ver Prov 4.23 y Sal 51.10...

II. SER FALSOS (v.2)

a) todo lo anterior solo demuestra lo falso que podemos llegar a ser. Falsos en primer lugar con Dios, pretendiendo creer que Él no está viendo lo que hacemos (que terrible es saber que Dios está en todos lados, y sobre todo en nuestros pensamientos).

b) ser falsos con los demás, como soy egoísta, e indiviudalista, no me importan los demás. Olvidándonos con ello precisamente el obejetivo de lo que es la iglesia (el edificar el pueblo de Dios, los unos a los otros, o sea una interdependencia). Ese era el objetivo de quien vendia sus propiedades y las ponia a disposicion de los Apóstoles, para que las repartieran...fraternidad.

c) y a ser falsos con uno mismo, todo ello nos produce un engaño en nuestra alma, de que estamos haciendo lo correcto, ante Dios, los demás y uno mismo. "Todo está bien, aunque sabemos que todo está mal". Cuando seguimos alimentándonos del pecado (autoengaño, tanto en nuestra apariencia fisica, como espiritual), lo único que hacemos es ALEJARNOS DE DIOS.

ver Prov. 20.10 e Is 8.13...

III. SER EXHORTADOS (v.3)

a) en su infinito amor Dios no quiere que sigamos en esa actitud totalmente alejada de Él, (o sea mantenernos muertos) por eso utiliza a hermanos con autoridad en Su Palabra para exhortarnos al arrepentimiento. Esto es dejar de hacer aquello errado, y volverse a Dios.

b) el volverse a Dios necesariamente conlleva un reconocimiento de nuestro pecado, no sacamos nada con decir que estoy arrepentido, si no reconocemos que todo lo que hemos hecho está manchado por el pacado. Señor contra ti, solo he pecado...pedir perdón por ello, que su misericordia nuevamente nos sea cubriendo.

c) al arrepentirnos y reconocer nuestro pecado (que es practicamente simultáneo), y pedir el perdón de ellos, debemos recomenzar, y llevar un vida sincera, con aquel Dios en quien decimos creer, como nuestro SEÑOR Y SALVADOR.

ver Heb 3.12-13

IV. UN CASTIGO EJEMPLAR (v.5)

a) por medio de la exposicion de la Palabra, el poder del Evangelio nos desnuda, pone a la luz toda nuestra maldad. Nuestro poco deseo de leer la Palabra de Dios, es precisamente por ello, por que nos enfrenta, y enrrostra todo neustra mal actuar, y nos llama a dejar algo que no queremos dejar, el delicioso pecado.

b) como lo es la muerte, a Ananías y Safíra Dios inmediatemente los castigo con la muerte, para dar ejemplo ante todos los demas, que con Dios no se juega. ¿Cuantas veces debieramos haber recibido esta muerte como castigo? Pero Dios en su infinita misericordia no nos aplica esa pena; pero de una u otra forma se encarga de que volvamos nuestro corazón hacia Él. Sin embargo la mayor muerte que pdoemos experimentar cada uno de nosotros es la separación espiritual (muerte), mientras andamos lejos de Él, estamos muertos.

c) para provocar el temor necesario de Su pueblo, somos muy inclinados a copiar lo malo de las personas, si esta actitud era pasada por alto, los demás harían eso y mucho más. Dios quiere que le temamos (no solo reverencia), que temblemos ante Él. ¿Será que hemos perdido el temor de Jehová?

ver Prov 11.21 y Sal 39.11...

APLICACION

• todos nuestros pensamientos deben ser cautivados por la Palabra de Dios para que tengamos buenos deseos.
• abandonemos todo tipo de engaño, esto involucra nuestra participación en la iglesia como con quienes son nuestra familia y cercanos.
• entreguemos a Dios lo que es de Dios y a la sociedad lo que es de ella; demos ofrendas, diezmos (10% de todos mis ingresos), o colaboración, para adorar a Dios, y para edificar el cuerpo de Cristo.
• la acumulacion de pecado en nuestra vida, en algún momento van a producir una gran explosión (por medio del Espíritu Santo) y quedaremos expuestos y avergonzados ante Dios y los demás, aplicándonos necesariamente la disciplina biblica.
• dispongamos el corazón a ser corregido por la Palabra de Dios.
• siempre andemos en el temor de Dios

a Dios sea la Gloria, por siempre... amén